Ácido folínico: ¿Qué es, para qué sirve y cómo se relaciona con la quimioterapia?

En el mundo de la oncología, ciertos medicamentos juegan un papel crucial para mejorar la eficacia de los tratamientos y reducir sus efectos secundarios. Uno de ellos es el ácido folínico, también conocido como folinato de calcio o leucovorina. Este compuesto es esencial en terapias que involucran agentes como el metotrexato y el 5-fluorouracilo (5-FU), utilizados comúnmente en el tratamiento de diversos tipos de cáncer.

¿Qué es el ácido folínico?

El ácido folínico es una forma activa del ácido fólico, una vitamina del complejo B que desempeña un papel vital en la síntesis de ADN y ARN. A diferencia del ácido fólico, el ácido folínico no requiere activación por la enzima dihidrofolato reductasa, lo que le permite actuar directamente en los procesos celulares. Esta característica lo hace especialmente útil para contrarrestar los efectos de medicamentos que inhiben dicha enzima, como el metotrexato.

¿Para qué se utiliza el ácido folínico?

El ácido folínico tiene varias aplicaciones médicas, siendo las más destacadas:

  1. Rescate tras tratamiento con metotrexato: El metotrexato es un agente quimioterapéutico que puede afectar tanto a células cancerosas como a células sanas. El ácido folínico se administra después del metotrexato para "rescatar" las células normales, reduciendo la toxicidad y permitiendo una recuperación más rápida del paciente.

  2. Potenciación del 5-fluorouracilo (5-FU): En combinación con el 5-FU, el ácido folínico potencia su efecto anticancerígeno, especialmente en el tratamiento del cáncer colorrectal. Esta combinación mejora la eficacia del 5-FU al estabilizar el complejo que inhibe la síntesis de ADN en las células tumorales.

  3. Tratamiento de anemias megaloblásticas: En casos donde la anemia es causada por deficiencia de ácido fólico, el ácido folínico puede ser utilizado para corregir la deficiencia y mejorar la producción de glóbulos rojos.

¿Cómo se administra el ácido folínico?

La administración del ácido folínico varía según la indicación médica:

  1. Vía oral: Para condiciones como la anemia megaloblástica, se prescribe en tabletas, como las de 15 mg.

  2. Vía intravenosa: En tratamientos oncológicos, especialmente en combinación con metotrexato o 5-FU, se administra por vía intravenosa para asegurar una absorción rápida y efectiva.

Es fundamental seguir las indicaciones del médico tratante y no modificar la dosis sin su consentimiento.

Efectos secundarios y precauciones

Aunque el ácido folínico es generalmente bien tolerado, pueden presentarse algunos efectos secundarios, como:

  1. Náuseas o vómitos.

  2. Reacciones alérgicas, como erupciones cutáneas.

  3. En casos raros, convulsiones, especialmente en pacientes con antecedentes de epilepsia.

Además, es importante informar al médico sobre cualquier otro medicamento que se esté tomando, ya que el ácido folínico puede interactuar con ciertos fármacos, como anticonvulsivos o antibióticos.

Leufotec: una opción confiable de ácido folínico

En el mercado mexicano, Leufotec es una de las presentaciones más reconocidas de ácido folínico. Se presenta en tabletas de 15 mg y está indicado para las aplicaciones mencionadas anteriormente. Su calidad y eficacia han sido respaldadas por profesionales de la salud, y su disponibilidad en farmacias especializadas facilita el acceso para los pacientes que lo requieren.

Es importante adquirir Leufotec en establecimientos autorizados y bajo prescripción médica para garantizar su uso seguro y efectivo.


Write a comment ...

Write a comment ...